5 razones para hacer un test vocacional

Si estás en el colegio y no tienes muy claro qué es lo que te gustaría estudiar, o si quizá tienes una idea pero no estás totalmente decidido es ideal que hagas una prueba de orientación vocacional que te ayude a elegir un programa o un área de conocimiento a desarrollar.

Antes de comenzar con las razones que te ayudarán a entender la utilidad de los test vocacionales, veamos con claridad qué son.

¿Qué es un test de orientación vocacional?

Es un cuestionario de preguntas sencillas, muchas veces de selección simple, donde eliges las opciones que más se adaptan a tu personalidad y a los temas con los cuales sientes afinidad. Por ejemplo, una pregunta puede ser si te apasiona más la conservación de la naturaleza, buscar soluciones para el comercio electrónico o el bienestar y la salud de las personas.

Estos test calculan, según tus respuestas, el tipo de carrera o el área de conocimientos que puede ser de tu interés. Así, puede que te sugieran estudiar algo de la Facultad de Ingeniería, Diseño e Innovación, de la de Sociedad, Cultura y Creatividad o de la de Negocios, Gestión y Sostenibilidad y que te aparezca un enlace para que revises más a fondo los pregrados relacionados y ver si alguno te llama la atención.

Razones para hacer un test vocacional

1.- Te ayudan a conocer las áreas de conocimiento. Cuando presentas un test vocacional usualmente te arrojará opciones que para orientarte respecto a carreras o a facultades, ello te da la oportunidad de entender el funcionamiento y agrupación de las áreas de conocimiento dentro y como incluso hay materias que ves en una u otra carrera.

Así tienes la oportunidad de entender qué es lo que más te gustaría estudiar y tienes la oportunidad de comparar programas que tengan cosas que te interesaría desarrollar. Lo ideal es entender bien los planes de estudio y que sepas qué vas a ver y si eso te gusta y te ayuda a conseguir tu sueño.

2.- Te hacen preguntas sobre tus aptitudes y gustos. Es raro admitirlo, pero muchas veces no sabemos realmente lo que queremos hacer con nuestra vida ni tampoco tenemos claras todas las aptitudes y las fortalezas que tenemos. Afortunadamente hay opciones de apoyo.

En las preguntas del test vocacional nos preguntan sobre lo que pensamos, lo que nos entusiasma y contestamos muchas veces sin pensarlo dos veces. Gracias a esto se puede llegar a armar un perfil y aparecen las recomendaciones asociadas a esos gustos, por lo que las carreras que salen son solo aquellas que podrían resultarnos afines.

3.- Averiguas sobre programas que quizá nunca habías escuchado. Siempre hay opciones populares entre las carreras universitarias, pero hay algunas que a pesar de no ser las más promocionadas tienen un área de estudio que llena nuestras expectativas y hasta nos emociona saber algo que no todo el mundo maneja.

Los test vocacionales también nos orientan hacia carreras en los que encajamos, sean los más populares o no, porque no se basan en una métrica de vender programas sino de orientar al estudiante según sus respuestas a la carrera que más le podría gustar.

4.- Mucho son gratuitos. Si bien hay algunos por los que tienes que pagar y pueden ser extensos, hay muchos que son gratuitos, de buena calidad y que te permiten tener una orientación según tu perfil.

Lo importante siempre que hagas un test vocacional veas que haya una institución de confianza detrás de su creación y que lo soporte, además que incluso si te surgen dudas de acuerdo a tus resultados y quieres ahondar más en las carreras puedes preguntar.

5.- Te dan una idea de tu perfil. Quizá lo más difícil de todo este proceso es saber con certeza quiénes seremos en cinco años. El momento de elegir carrera determina un esfuerzo en saber lo que realmente queremos hacer, implica una inversión económica y está también sujeto a que disfrutemos las materias que veamos.

Por eso quizá muchas de las preguntas que vayamos contestando nos ayuden también a reflexionar sobre la diferencia entre lo que nos interesa y lo que nos apasiona. Piensa que cada parte de un test está hecho para ayudarte y darte pistas que aclaren tu situación.

Tomemos un respiro hondo, pensemos que las decisiones que tomemos serán las adecuadas mientras sigamos nuestro instinto y estemos bien informados sobre todas nuestras opciones, ¡buena suerte en tu próxima elección de programa!